domingo, 10 de junio de 2012

Comentario:

Mineras intocables
Por Luis Antonio Páucar Solís

Estamos lejos en el Perú de tener una minería con responsabilidad social y ambiental, el buen vecino que se preocupe, junto a nuestras autoridades, y la sociedad civil en su conjunto por el desarrollo sostenible de los pueblos de su entorno. El socio estratégico que deberían ser las mineras, se limita sólo como un inquilino que destruye, se enriquece y posteriormente se retira; conceptos que ellos nos vendieron , quedaron solo en teoría o encarpetados en alguna oficina (socios estratégicos, desarrollo sostenible, sustentable, cuidado del medio ambiente, desarrollo de la ganadería, la agricultura, industria, turismo, textiles agroindustria y otras actividades económicas, sociales y locales,no se han expandido como nos lo dijeron)

Es innegable que la minería viene a ser la principal fuente de divisas en la economía nacional, sin embargo es percibida como una actividad que produce impactos ambientales irreversibles, que afectan a las comunidades de su entorno que afecta directamente a una zona con tradición ganadera. En Huallanca estos hechos son reales y comprobados, como los enormes pasivos ambientales mineros, como el trato prepotente de algunos ejecutivos de las empresas que se creen intocables, amparados en el poder político.

Las grandes empresas mineras, el caso Antamina en nuestro medio, están blindadas, por los contratos de estabilidad jurídica, tributaria, y administrativa herencia de las políticas económicas de Fujimori, esto hace que se crean intocables y no les interesa cumplir convenios con el pueblo ni con las comunidades, tampoco asumir sus responsabilidades, como por ejemplo en Huallanca: los jirones Junín , Tarapacá, Prolong. 28 de julio, incluido el puente Santa Rosa, han servido para el pase de vehículos pesados de la minera Antamina (claro que lo hacían a altas horas de la noche o en las madrugadas)llevando materiales, equipos eléctricos, materiales de construcción, maquinarias, con vehículos de alto tonelaje; todo para la tan mentada ampliación de la minera.

Pero quién o quiénes le reclaman a la poderosa Antamina del deterioro de las pistas, las rajaduras de las casas, el deterioro del puente Santa Rosa, qué le pidieron nuestras autoridades, el Frente de Defensa, la Mesa de Concertación con el anterior alcalde, y cómo están negociando hoy los convenios de desarrollo sostenible; no lo sabemos ni lo sabremos en mucho tiempo porque se negocia en Lima y Huaraz, y con asesores sin ningún compromiso, a puerta cerrada;  pero como todo se sabe ya sabremos en su momento en qué condiciones se firmaron los convenios de desarrollo con la poderosa Antamina, esperamos que no sean  migajas, como: pintar la fachada de la iglesia, embellecimiento del puente San Juan, donación de colchones usados, donación de madera de embalaje o sea basura. Se requiere una necesaria voluntad política, sin arreglos bajo la mesa.

Las utilidades de Antamina en estos últimos años fue superior a US$1000 millones anuales, del 2006 al 2009 US$6320millones de dólares. Cuánto costó la tan sonada ampliación de Antamina $1288 millones, pero con los beneficios de estabilidad tributaria o reinversión de capital dejaron de pagar impuestos a la renta de 900millones así la reinversión que se esta haciendo en estos cuatro años del 2010 al 2013se financio con el flujo de caja y no solo eso Antamina continua teniendo utilidades, ¿qué bonito negocio?, pero el compromiso por cubrir el faltante de cualquier obra que se realice en la región Ancash mientras dure los trabajos de ampliación; seguro ya lo olvidaron.

Las empresas mineras son incapaces de cumplir con sus convenios o reconocer sus responsabilidades pese a que esto significaría para ellos una migaja o como quitarle un pelo al gato, esto pues es una de las razones por lo que los pueblos reclaman respeto, y siguen las preguntas ¿Dónde esta el socio estratégico?, ¿Dónde esta la minería con responsabilidad social y ambiental?, ¿Dónde esta el buen vecino que nos iban ayudar a salir de la pobreza?

El riesgo de que las empresas mineras se vayan a otros países a invertir sus capitales es pues un cuento chino más de las mineras, es tan grande las utilidades que reciben y tan desigual su distribución que las empresas no se van a ir a países donde no gozan de tantos beneficios como en Chile o en Australia, en esta última donde las empresas pagan un impuesto del 40% a las utilidades extraordinarias.