miércoles, 28 de noviembre de 2012

Yo Opino:


SOCIEDAD SIN COMPROMISO
Rolando Húbner Marcos Picón

Decía Oscar Wilde “conocemos el precio de todo y el valor de nada”,  podemos decir que es hoy una de las características de nuestra sociedad, el culto al entretenimiento y a la frivolidad; hoy estamos más interesados en exhibir o impresionar y no nos detenemos un momento en razonar, en reflexionar, en explorar.

Nuestra identidad hoy puede ser mudada una y otra vez para ser adaptada de acuerdo a la ocasión o al momento, nuestra identidad original ha sido suprimida, idolatramos lo superficial, parece que como sociedad estamos perdiendo la brújula hacia a donde queremos ir como personas como pueblo o como sociedad. El consumismo, el culto por la imagen, el individualismo, el culto por lo irreal, falso y mentiroso, son características de nuestra sociedad, tal vez deberíamos sumarle a esto la falta de identidad, el silencio, la falta de representatividad.Son manifestaciones de esta enfermedad que estamos padeciendo en este tiempo.

Esta cultura nos ha llevado a fantasear, a confundir lo real y lo imaginario, así como lo verdadero y lo falso, nos hemos comprado espejos más grandes para poder ver la imagen que nosotros queremos ver, y salir a la calle con una identidad falsa, aparentando ser lo que no somos, enmascarados. Lamentablemente esta cultura ha sido trasladado al mundo de la política, donde las prácticas nada inocentes de la cultura light nos ha vuelto seres mecánicos, donde nos da flojera debatir temas de fondo, los problemas que como pueblo y sociedad tenemos todos una opinión política, o sobre nuestras autoridades, pero de lejitos no más sin que nadie me escuche, y siempre estará la misma respuesta “la política es así”, “todos los políticos roban “.

Esta sociedad donde es marcada los índices de desigualdad, el fantástico crecimiento económico anunciado como coro publicitario por nuestros políticos, los inmensos ingresos provenientes de los tributos mineros no vayan a terminar siendo una maldición, porque estamos creando una sociedad estática, sin compromiso, y creyendo que esta época dorada de la minería nunca se va acabar. Esta es nuestra sociedad donde no esta permitido quejarse, ni plantear alternativas de desarrollo, esta actitud facilista y sin compromiso es muy dañino y malo  porque nos prestamos a un juego de mentiras, calumnias, de dimes y diretes nada fructíferos, donde quienes ganan son los que buscan sus beneficios personales y sus utilidades.

 En este tipo de sociedad donde todo se puede, si se cuenta con el dinero para comprarlo. Es la cultura del internet, el teléfono móvil, del alka seltzer o el alivio rápido, de los autoservicios, los cajeros automáticos, del control remoto, la cultura light, ligerito no más y sin esfuerzo, es la que estamos formando. No es malo disfrutar de las ventajas tecnológicas, lo malo es hacerse esclavo de este tipo de cultura, donde nos estamos volviendo seres mecánicos lentos ociosos, donde los problemas y algunas necesidades se solucionan solo pulsando un botón.