MENTIRAS…?
Luis Antonio Páucar Solís
Luis Antonio Páucar Solís
Reza un dicho muy popular "Cuando el río suena, es porque piedras lleva". El actual municipio de Huallanca se aproxima a los primeros nueve meses de gestión, mientras trata de convencernos de las bondades de su gestión, y justificar la exagerada e innecesaria contratación de personal como: gerentes, secretarias y secretarios, el personal de seguridad ciudadana que dirige el tránsito en los jirones comercio y 28 de julio. Nuestra sociedad, los huallanquinos que vivimos el día a día en esta tierra, nos preguntamos ¿en qué no equivocamos? -cada vez más escépticos y desencantados- observamos con certeza que no es ni mucho ni distinto lo que se puede esperar.
Corrupción, tráfico de influencias, peculado, uso privado de bienes público; parece que son las características de este gobierno municipal, el clientelismo y la corrupción que se manejan en las licitaciones de obras públicas amañadas, direccionadas para pagar deudas de campaña, favores políticos que se le están haciendo impagables como lo denunciáramos en artículos anteriores, hoy parece confirmarlo un diario de circulación regional.
Esta tendencia nos marca un pueblo con desigualdad, una gestión institucional precaria con tantos gerentes y asesores que no conocen nuestra realidad, ni saben lo que queremos como pueblo; males conocidos que no tienen solución como la falta de agua, el problema con la energía eléctrica, el alquiler de una camioneta para uso exclusivo de nuestro alcalde, la contratación de toreros para la última feria taurina; no hacen más que confirmar los actos de corrupción y malversación de fondos.
En este contexto complejo y difícil, tengo que pedir a los huallanquinos residentes en los distintos puntos del país, a los líderes y candidatos que en cada elección municipal nos visitan, formar corrientes de opinión y generar debates, que contrasten ideas, para hacerles reflexionar, hacerles conocer nuestra realidad, nuestras costumbres, nuestras tradiciones, y lo que buscamos como pueblo, porque sino estoy seguro que tendremos cuatro años más perdidos, sin encontrar el camino que nos lleve al pueblo próspero que tanto anhelamos.
Corrupción, tráfico de influencias, peculado, uso privado de bienes público; parece que son las características de este gobierno municipal, el clientelismo y la corrupción que se manejan en las licitaciones de obras públicas amañadas, direccionadas para pagar deudas de campaña, favores políticos que se le están haciendo impagables como lo denunciáramos en artículos anteriores, hoy parece confirmarlo un diario de circulación regional.
Esta tendencia nos marca un pueblo con desigualdad, una gestión institucional precaria con tantos gerentes y asesores que no conocen nuestra realidad, ni saben lo que queremos como pueblo; males conocidos que no tienen solución como la falta de agua, el problema con la energía eléctrica, el alquiler de una camioneta para uso exclusivo de nuestro alcalde, la contratación de toreros para la última feria taurina; no hacen más que confirmar los actos de corrupción y malversación de fondos.
En este contexto complejo y difícil, tengo que pedir a los huallanquinos residentes en los distintos puntos del país, a los líderes y candidatos que en cada elección municipal nos visitan, formar corrientes de opinión y generar debates, que contrasten ideas, para hacerles reflexionar, hacerles conocer nuestra realidad, nuestras costumbres, nuestras tradiciones, y lo que buscamos como pueblo, porque sino estoy seguro que tendremos cuatro años más perdidos, sin encontrar el camino que nos lleve al pueblo próspero que tanto anhelamos.
