LA SEMANA SANTA EN HUALLANCA
(Bolognesi - Ancash)
La Semana Santa en Huallanca
tiene sus peculiaridades en su celebración que va desde “Viernes de Dolores”
hasta la “Pascua de Resurrección”. Son ocho procesiones a cargo de los
Mayordomos que tienen el compromiso de cumplir con las procesiones en horas de
la noche, y se complementa con la preparación del tradicional “dulce de papas”
para el deleite de los familiares, amigos y todos los que participan y
colaboran con el Mayordomo.
El párroco de la iglesia
cumple con la programación establecida
para la Semana Santa, de acuerdo a las costumbres y las obligaciones del clero;
como las novenas y misas, y luego las procesiones por las principales calles de
la ciudad en horas de la noche.
LAS PROCESIONES
- DOMINGO DE RAMOS: En horas de la tarde, es la entrada del “Señor de Ramos” que va sentado sobre un asno, y a su paso la feligresía lo recibe con alfombras en las calles, confeccionadas a base de flores vivas, también de aserrín a colores con representaciones de figuras artísticas; es todo una demostración de arte y devoción. La feligresía acompaña con ramas de palmas.
- LUNES SANTO: El Señor
Cautivo
- MARTES SANTO: El Señor de la
Justicia y la Virgen Dolorosa. Las siguientes noches también saldrá la imagen
de la Virgen de los Dolores.
- MIERCOLES SANTO: El Señor
Nazareno.
- JUEVES SANTO: El Señor Crucifica
- VIERNES SANTO: El Señor del Santo Sepulcro
- DOMINGO: Pascua de
Resurrección: Sale la procesión a las 4 de la mañana, con el Señor de la Resurrección al
encuentro con la Virgen en la plaza de
armas; ceremonia muy solemne, cuando la imagen de la Virgen de los Dolores es
cambiada de manto de negro a blanco, como señal de resurrección de su hijo.
El recorrido de las procesiones
parten de la Iglesia San Juan (matriz) y también de la Iglesia Carmen Alto,
continuando por los jirones Arequipa, Leoncio Prado, Comercio, plazuela de Carmen
Alto, Arequipa, plaza de armas y retorna
a la iglesia matriz o de Carmen Alto.
Culminada la procesión, cerca de
la media noche, los mayordomos del Señor y de la Virgen, para completar su
compromiso religioso, invitan a los fieles al conocido “pasaremos” a la casa,
donde ofrecen el rico café aromático con los deliciosos pasteles
elaborados para ésta ocasión, como
roscas, molletes, bollitos para café, pan de maíz, bizcochuelos, suspiros, etc.
Dos días antes para la procesión
se prepara el dulce en la casa del Mayordomo con el apoyo de los familiares y
las buenas amistades; requiere de muchas manos y un gran trajín. Siempre hay un
“maestro” o experto que dirige la faena, que dispone las diversas fases o
etapas de su preparación Estarán listos los materiales, ingredientes,
utensilios, como los peroles grandes de cobre. Preparar el dulce es una jornada
de todo un día más una noche y pasar la vigilia alrededor de las fogatas o
“tullpas”, a base de leña de eucalipto seco.
La noche avanza y el entusiasmo
se acrecienta entre los colaboradores del Mayordomo, quién los estimula y
reconforta con el “chinguirito” o bebida caliente a base de aguardiente con
hierbas medicinales, y más tarde vendrá el caldo de carne para renovar las
energías y continuar la tarea toda la noche .
Se prepara dos tipos de dulce a
base de papas, como dicen, el de “primera” y otra de “segunda”; que varía según el color más (oscuro y claro) y por su calidad; según el “punto” que fija el
maestro. Ya cuando está por amanecer estará listo el “mishky”; el maestro
indica que “ya está a punto”, entonces se saca los peroles de la fogata y de
inmediato se procede a “enterrarla” en tierra para que pueda “dormir”el dulce,
A media mañana comenzará el
reparto del rico y delicioso dulce de papas, de acuerdo a una relación enviarán
a los domicilios de las personas que
colaboran con las costumbres religiosas: arreglo de las andas del Señor y de la
Virgen, los participantes en la procesión,
en la preparación del dulce, y los donantes de ingredientes. El dulce se
sirve en vasijas de vidrio o porcelana, como si fuera un postre, acompañado de ricos pasteles.
La distribución del dulce es un día antes de la procesión; el reparto es gratuito como demostración de fe y reconocimiento por las colaboraciones recibidas.