Jóvenes y
los nuevos retos
Rolando Marcos Picón
Después mucho tiempo nos
reunimos con amigos en Huallanca, donde una vez más, mostramos nuestra
preocupación, por el momento que estamos viviendo, la crisis mundial, la
reducción del canon minero, la caída en los precios de los minerales, la
paralización en nuestro medio de importantes proyectos mineros, la paralización
del proyecto de ampliación de la minera Antamina, la falta de empleo, negocios
que se cierran, y el nuevo reto que tienen los jóvenes.
Cómo estamos entendiendo
nuestro futuro como pueblo, como sociedad, como familia; aunque muchos no nos
damos cuenta. Qué mensaje le estamos dando a nuestros jóvenes; que la vida es
fácil, divertida, sin compromisos, y todo se soluciona en un juego como el que
estamos acostumbrados a ver a nuestro alrededor o en la televisión.
La vida no es tan linda ni
fantasiosa como una telenovela, nuestros abuelos dirían “no todo lo que brilla
es oro”; muchas veces vamos a fracasar, nos vamos a rendir, vamos a querer
huir, vamos a sentir que nada tiene sentido y vamos a pensar en tirar la toalla;
pero no. Este mundo no es de ganadores, de triunfadores, o de los mejores; este
mundo es de gente que trabaja, se esfuerza, donde habrán cosas que le van a
salir bien, otras no tan bien, y algunas mal y esa gente que hoy ha triunfado ha
tenido que pasar por todo esto.
En este mundo de la cultura
de lo ligero de lo fácil, nos estamos acostumbrando a mostrarle a gente que no
le interesa que somos felices, mostrando fotos de nuestros viajes, de nuestras
juergas, de nuestras borracheras; pero el dolor se lleva por dentro y tendremos
que trabajar mucho más.
Muchas veces sólo miramos lo
mal que nos ha ido y nos negamos a continuar; cuando los grandes logros se dan
de caída en caída, de tropiezo en tropiezo se aprende a caminar, o muchas veces
nos creemos perfectos y que no necesitamos nada;, ni uno ni lo otro; porque si
no tendría razón de ser la lluvia sin la
salida del sol, el llanto sin la sonrisa, la palabra sin el silencio, la paz
sin el conflicto, la compañía sin la soledad, la decepción sin el perdón.