¿DÓNDE QUEDARON TUS
SUEÑOS, EZEQUIEL?
El viernes 14 de marzo fue asesinado Ezequiel Nolasco Campos, ex consejero y pre candidato a la Región Ancash; hecho lamentable que pone en debate los móviles políticos
de consecuencias funestas.
Escribe: Wilder Calderón Castro*
Ha pasado más de una semana. El olor a multitud se disipó en las
calles. El estruendo ensordecedor del silencio de los
parques ya no clama ¡Justicia! La rutina se ha
enquistado, nuevamente en la programación de los noticiarios.
No queda nada de esa estela trashumante de la procesión del pesar que
acompañó tu féretro. ¿Dónde están los sahumerios destilando su
perfume? ¿Dónde están ahora quienes se rasgaban las vestiduras por
tu partida, por mi culpa, por mi culpa, por mi gran culpa?
Todos han olvidado las promesas que hicieron frente a tu cuerpo inerte,
salvo tu familia. Los “no cejaremos en dar con los
responsables de este crimen”, “los haremos pagar por tu muerte”, “no
descansaremos hasta llegar al fondo de este caso” y toda esa perorata que
recitan de memoria los demagogos que aprovechan la lluvia de flashes,
hermano.
Pero, ¿dónde estaban todos cuando pedías justicia por tu hijo político,
Roberto Torres, asesinado el 20 de julio del 2010, por protegerte en la puerta
de tu casa de los desalmados que irrumpieron en la tranquilidad de tu
hogar? ¿Dónde estaban todos cuando pedías garantías por tu
familia y protegerla del sicariato, de no sé qué intereses sombríos? ¿Dónde
estaban todos cuando no había cámaras filmando? Ellos siempre están
para la foto, pero luego ¿qué?
Desde jóvenes abrigamos los mismos sueños, pero siempre estuvimos en
veredas distintas como dos paralelas que se unen en el infinito; sin embargo,
eso no importaba. Caminé cerca de tu sombra, nos encontramos
siempre, mi hermano, en la arenga social y siempre compartimos el credo de la
justicia social. “Te quise a mi modo y de a ratos tomé
tu voz libre como el agua”, como diría el poeta.
Ha pasado más de una semana y la frágil memoria colectiva de nuestra clase
política, apenas recuerda que un luchador social fue asesinado en Huacho, por
un joven sicario, el último viernes 14 de marzo. ¿Dónde están los
monumentos de tu efigie que te debe la ciudad? ¿Dónde están todos?
Valientemente denunciabas la corrupción ante el Poder Judicial y Ministerio
Público y ya son múltiples las víctimas de asesinos a sueldo: Luis Sánchez
Milla, Jorge Boyascky Paredes, José Montalván Macedo, Hilda Saldarriaga
Bracamonte.
Aún no puedo creerlo. Dicen que has muerto, pero no creo ni una
línea. Tú no puedes morir. El olvido no puede ser
panteón de una vida ejemplar. Tu existencia transpone ese
maldito alzheimer que ataca nuestra sociedad, pues vives encadenado en el
corazón del pueblo. De seguro compartes estancia con Phillips,
Arévalo, Barreto y tantos líderes sindicalistas, mártires del pueblo.
¿Dónde quedaron tus sueños, Ezequiel? ¿Cuándo saldremos de esta
pesadilla, hermano?
-----------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------
*Dr. en Educación y ex Congresista de la República.
-----------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------
*Dr. en Educación y ex Congresista de la República.