¿Y ahora qué ?
Rolando Húbner Marcos Picón.
El inicio del
2015 vino marcado por el cambio en la administración municipal, tenemos nuevas
autoridades, una manera distinta de gobernar a un pueblo con muchas
aspiraciones, muchos sueños truncos, y con ciudadanos cada vez más exigentes; pero
esperamos un gobierno municipal más franco, claro, transparente y conveniente
para los ciudadanos: ¿tendrán éxito?
Como
ciudadanos esperamos que antes culminar el primer mes de gestión nuestras nuevas autoridades nos presenten un
informe detallado, de cómo recibió la Municipalidad de Huallanca en el aspecto
económico, administrativo, y qué se hará en el futuro, las medidas que se tomarán
en los próximos días, cuáles son las medidas a largo y mediano plazo; la
campaña electoral, los ofrecimientos, la demagogia, terminaron y debe quedar
fuera.
Nuestro
pueblo tiene uno de los más altos índices de desaprobación de sus autoridades,
lo hemos visto en estos últimos años, lo sabe el alcalde actual. El mayor
desafío para nuestras autoridades será que, sus pobladores participen de los
beneficios, de los retos, que como pueblo tenemos. Necesitamos urgente
desarrollar una forma de gobierno sustentada en la democracia, en la democracia
participativa; necesitamos un gobierno municipal eficaz, transparente y
participativo que impulsen un proceso de desarrollo inclusivo, sostenible en el
tiempo y respetuoso del medio ambiente.
Hoy en la Municipalidad
de Huallanca vemos el retorno de muchas caras conocidas, aunque esto no nos
debe sorprender; todos esperamos que nos demuestren que si hay otra manera de
gobernar, tendiendo puentes, buscando la inclusión en un pueblo tan
fragmentado, con ciudadanos en un aislamiento voluntario, sin compromiso.
Hay un proverbio oriental que dice: “es absurdo continuar haciendo lo mismo y
esperar resultados diferentes”.
Esperamos que
quienes asuman las gerencias y secretarías claves, estén a la altura de las
circunstancias y contribuyan al desarrollo de nuestro pueblo,
aprovechando las oportunidades para gestionar el buen gobierno que todo
ciudadano se merece.
El sentir
popular en las calles es quien mejor nos refleja la opinión generalizada a
cerca de una situación social de apoyo o rechazo a la nueva
administración municipal; por lo que se ve y se dice, a nuestras actuales
autoridades no les será fácil gobernar un pueblo.
Huallanca
necesita gobernantes que prediquen con el ejemplo, abiertos al diálogo, de
pensamiento crítico, que respeten la diversidad de ideas, condición básica para
construir consenso y facilitar la participación ciudadana en la construcción de
proyectos duraderos para nuestro pueblo.Necesitamos
autoridades que le digan a la gente que si es posible un Huallanca mejor.
Es urgente un cambio de actitud, no el que quieren las autoridades de turno,
sino el que necesita Huallanca. Si no hace nada, despídase de
esta gran oportunidad que el pueblo les ha dado de ser quienes enrumben a
nuestro pueblo al desarrollo.